POEMAS- CUENTOS - RELATOS - BIOGRAFÍAS - CANCIONES - VIDEOS - GRANDES AUTORES - POETAS -

"Queremos que cada palabra ilumine tu rostro, roce tu alma, te eleves y echemos juntos a volar"




ROZANDO EL ALMA: GRUPO CASIOPEA LITERARIO


jueves, 21 de enero de 2010

ANA ROSSETTI- biografía- obras y poemas


Ana Bueno de la Peña "Ana Rossetti" es una escritora española nacida en San Fernando, (Cádiz); 15 de mayo de 1950.

De origen italo-española, el conjunto de la obra de Ana Rosetti se caracteriza por una amplia gama de registros y de géneros. Ha combinado a lo largo de su vida el teatro, la poesía y el género narrativo. Su obra es un mezcla de erotismo, esteticismo y culturalismo. Aunque es muy conocida por su obra poética, también ha escrito textos teatrales, un libreto para ópera (en torno a la figura de Oscar Wilde, estrenada en la Sala Olimpia de Madrid en 1993 y con música de Manuel Balboa), novela, libros para niños y relatos. Esta poeta gaditana se encuentra por derecho propio entre los mejores poetas españoles de la poesía española contemporánea.
Obra poética
Los devaneos de Erato, 1980, Premio Gules (Cuando en la década de los ochenta predominaba en España una corriente poética cultista cultivada por los epígonos del grupo de poetas conocido como Los novísimos, con “Los devaneos de Erato”, Ana Rossetti introduce nuevas propuestas líricas cargadas de referentes eróticos transgresores)

Dióscuros 1982 (recogido en Indicios vehementes)
Devocionario, 1985, Premio Internacional de Poesía Rey Juan Carlos I.
Indicios vehementes, 1985
Yesterday (antología de sus libros anteriores más algunos poemas inéditos), 1988
Apuntes de ciudades 1990
Virgo potens 1994, con Jorge Artajo
Punto umbrío, 1996
La nota del blues 1996
Ciudad irrenunciable 1998, Antología.
La ordenación: retrospectiva (1980-2004), 2004, Poesía completa.

Producción narrativa
 
Plumas de España, 1988
Prendas íntimas 1989, relatos eróticos.
Hasta mañana, Elena 1990
Alevosías, 1991, Premio La Sonrisa Vertical de Novela Erótica
'Mentiras de papel 1994
Una mano de santos, 1997, relatos
El antagonista, 1999
Recuento. Cuentos Completos, 2001
El aprendizaje personal 2001
El botón de oro 2003, novela policíaca.

Literatura infantil y juvenil
 
Un baúl lleno de momias 1997
Un baúl lleno de dinosaurios 1997
Un baúl lleno de lluvia 1997
Un baúl lleno de piratas 1997
El club de las chicas Robinson 1999
Las aventuras de viela calamares 1999
Viela, Enriqueto y su secreto 2000
Álex, Luisito y el osito y un montón de huevos fritos 2001

Otros géneros

El secreto enamorado 1993, libreto de ópera.
Pruebas de escritura 1998, ensayo.
Las bodas reales 2005, con Jorge Artajo.
Buenos días Sr. Hoy 2007, con Jorge Artajo.

POEMAS:

CUARTO
Apoyar la frente enfebrecida en la nublada celosía del confesionario. Enumerar los inasibles recorridos de la serpiente. Buscar un nombre para hacer cada crimen discernible. Dibujar las noches; las llagas de las paredes encaladas en la oscuridad, brillando; los colibríes enzarzados, enredando sus lenguas de pistilo bajo los rígidos almidones de mis tocas. Apoyar la frente. Abandonarse. Sentir cómo el anillo que atenaza mi corazón, se me resbala por el pecho como un crisantemo decapitado.

De "Virgo Potens" 1994


DIOTIMA A SU MUY APLICADO DISCÍPULO
                               "El placer es el mejor de los cumplidos."
                                              Coco Chanel

El más encantador instante de la tarde
tras el anaranjado visillo primorosa.
Y en la mesita el té
y un ramillete, desmayadas rosas,                                  
y en la otomana de rayada seda,
extendida la falda, asomando mi pie
provocativo, aguardo a que tú avecines
a mi cuello, descendiendo la mirada
por el oscuro embudo de mi escote,
ahuecado a propósito. Sonrójome
y tus dedos inician meditadas cautelas
por mi falda; demoran en los profundos túneles
del plisado y recorren las rizadas estrellas
del guipur. Apresúrate, ven, recibe estos pétalos
de rosas, pétalos como muslos
de impolutas vestales, velados. Que mi boca
rebose en sus sedosos trozos, tersos y densos
cual labios asomados a mis dientes
exigiendo el mordisco. Amordázate,
el jadeo de tu alto puñal, y sea tu beso
heraldo de las flores. Apresúrate,
desanuda las cintas, comprueba la pendiente
durísima del prieto seno, míralo, tócalo
y en sus tiesos pináculos derrama tu saliva
mientras siento, en mis piernas, tu amenaza.


EL JARDÍN DE TUS DELICIAS

Flores, pedazos de tu cuerpo;
me reclamo su savia.
Aprieto entre mis labios
la lacerante verga del gladiolo.
Cosería limones a tu torso,
sus durísimas puntas en mis dedos
como altos pezones de muchacha.
Ya conoce mi lengua las más suaves estrías de tu oreja
y es una caracola.
Ella sabe a tu leche adolescente,
y huele a tus muslos.
En mis muslos contengo los pétalos mojados
de las flores. Son flores pedazos de tu cuerpo.

"Los devaneos de Erato" 1981

HUBO UN TIEMPO...

Hubo un tiempo en el que el amor era un
intruso temido y anhelado.
Un roce furtivo, premeditado, reelaborado durante
insoportables desvelos.
Una confesión perturbada y audaz, corregida mil
veces, que jamás llegaría a su destino.
Una incesante y tiránica inquietud.
Un galopar repentino del corazón ingobernable.
Un continuo batallar contra la despiadada infalibilidad
de los espejos.
Una íntima dificultad para distinguir la congoja del
júbilo.
Era un tiempo adolescente e impreciso, el tiempo del
amor sin nombre, hasta casi sin rostro, que merodeaba,
como un beso prometido, por el punto más umbrío de la
escalera.

POR QUÉ MI CARNE NO TE QUIERE VERBO...

Por qué mi carne no te quiere verbo,
por qué no te conjuga, por qué no te reparte,
por qué desde las tapias no saltan buganvillas

con tus significados
y en miradas de azogue que no reverbera el sol
dando de ti noticia,
ni se destapan cajas con tu música
y su claro propósito,
y ningún diccionario ajeno te interpreta.
Por qué, por qué, Amor mío,
eres mapa ilegible,
flecha desorientada,
regalo ensimismado en su intacto envoltorio,
palabra indivisible que nace y muere en mí.

Chico Wrangler

Dulce corazón mío de súbito asaltado.
Todo por adorar más de lo permisible.
Todo porque un cigarro se asienta en una boca
y en sus jugosas sedas se humedece.
Porque una camiseta incitante señala,
de su pecho, el escudo durísimo,
y un vigoroso brazo de la mínima manga sobresale.
Todo porque unas piernas, unas perfectas piernas,
dentro del más ceñido pantalón, frente a mí se separan.
Se separan.

De "Indicios vehementes" 1985

No hay comentarios: